El gratinado de puerros y patatas es un plato reconfortante, emblemático de la cocina invernal. Se caracteriza por un equilibrio perfecto entre el sabor ligeramente dulce y terroso de los puerros y la suavidad de las patatas. Aquí te presentaremos algunos consejos esenciales para lograrlo, así como un método detallado.
Elegir los ingredientes adecuados
Selección de puerros
La elección de los puerros adecuados es fundamental para el éxito del platillo. Opta por puerros que sean firmes al tacto, con hojas verdes brillantes y un bulbo blanco intacto. Evita aquellos con manchas o signos de sequedad.
Elección de las patatas
Las patatas deben ser del tipo harinoso para que aporten una textura suave al gratinado. Las variedades más recomendables son la Maris Piper o King Edward pero, aunque estas no estén disponibles, cualquier tipo harinoso funcionará bien.
A continuación, nos adentraremos en cómo preparar y cortar estos vegetales correctamente.
Preparación y corte de los vegetales
Preparación previa
- Precocer los puerros: Se recomienda blanquear los puerros antes de agregarlos al gratinado. Corta las partes blancas del puerro por la mitad y sumérgelas en agua hirviendo durante unos 10 minutos. Escúrrelos y añádelos al recipiente para el gratinado.
- Preparar las patatas: Las patatas también deben ser precocidas para asegurar una cocción uniforme. Córtalas en rodajas finas o usa una mandolina para un rápido horneado. Precocinarlas en agua durante 10 minutos es ideal, aunque también puedes optar por cocerlas al vapor.
Ahora que nuestros ingredientes están preparados, pasemos al secreto de una salsa bechamel perfecta.
Secretos de una bechamel cremosa
Hacer la bechamel
Para una bechamel suave y cremosa, comienza derritiendo mantequilla a fuego medio-bajo. Añade gradualmente harina mientras remueves constantemente hasta obtener una pasta lisa. Luego, vierte lentamente leche caliente mientras continuas revolviendo hasta obtener la consistencia deseada.
Una vez lograda nuestra bechamel perfecta, podemos empezar con el montaje del gratinado.
Montaje del gratinado perfecto
Capa por capa
En un plato engrasado con mantequilla, coloca una capa de patatas seguida de una capa de puerros y finalmente tu salsa bechamel. Repite este proceso hasta terminar los ingredientes, asegurándote de acabar con una última capa de patatas.
Pasamos ahora a la etapa crucial: la cocción.
Cocción para una textura ideal
Temperatura y tiempo
Precalienta tu horno a 180-200°C. Una vez ensamblado el gratinado, hornéalo durante aproximadamente 1 hora, o hasta que la parte superior esté dorada y crujiente.
Finalmente, compartiremos algunos consejos sobre cómo presentar y servir este delicioso platillo.
Consejos de presentación y servicio
Servir el gratinado
La forma ideal de servir este platillo es directamente desde el horno. Puedes complementarlo con una ensalada verde fresca o con un vino blanco seco.
Otras variantes
Otros ingredientes pueden ser añadidos al gratinado para enriquecer su sabor, como queso rallado tipo comté o gruyère para obtener una capa superior más sabrosa. También puedes reemplazar la nata líquida por leche o bechamel para una versión más ligera.
El gratinado de puerros y patatas no sólo es fácil de preparar, sino también perfecto para hacerlo con anticipación, lo que es ideal para la cocina en serie. Es un plato reconfortante y nutritivo que puede ser servido junto a una ensalada para una comida equilibrada. Siguiendo estos sencillos consejos y utilizando ingredientes de temporada, ¡estás seguro de lograr este clásico platillo !
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